- Área: 296 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Gustavo Sosa Pinilla
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Proveedores: Alccemar, EQUITONE, FV, Retak
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El sitio corresponde a un barrio en desarrollo que, como otros en la pcia. de Bs As, apela a la recuperación de suelos de mala calidad mediante la acumulación del agua excedente en un espejo central. La ubicación en el perímetro de éste propone alternativas de paisaje y profundidad visual interesantes para potenciar los usos al aire libre. Asimismo, esta condición sugiere un trabajo diferenciado de calibre de la intimidad respecto de la proximidad o de las vistas largas.
Los requerimientos de usos ubicaban desde el comienzo a las instalaciones exteriores en una jerarquía compartida con las interiores. La volumetría disocia la direccionalidad de sus dos niveles proporcionando orientaciones convenientes, espacios intermedios semicubiertos y la posibilidad de ajustar las diferentes alturas según los usos. La definición del borde construido se propone como gradiente de relación interior exterior. De esto resulta que las transiciones no son precisas sino extensiones.
Los lugares que componen la obra son más bien estancias o dilaciones de un continuo espacial y visual. Existe la posibilidad de establecer líneas visuales a través y desde los distintos sitios de la casa. Incluyendo el afuera. Una trama modular rigurosa aparece parcialmente en la articulación del vacío, que recorre y vincula cada porción de la obra. Su subyacencia ordena la manipulación material que define espacios, grados de exposición solar y la ubicación de cada elemento estructural.
El orden constructivo se exhibe, haciendo visibles sus componentes. La estructura es mixta, compuesta de elementos portantes verticales metálicos y horizontales de H°A°. Una gran viga expone el mayor esfuerzo estructural de la obra, de la cual cuelga parte de la planta alta. Un rodillo metálico macizo resuelve la transferencia del momento flexor a su columna portante, como un nexo necesario y reflexivo para la complementariedad de la estructura.
La textura de los bloques de HCCA reaparece detrás de las placas de fachada ventilada. No se disimulan soportes, remaches ni la condición de piel, de estructura o de material con espesor. La expresividad constructiva, si bien no es objetivo proyectual, define su lenguaje. La luz y su intencionada manipulación si son objetivo y materia proyectual. Determinan decisiones de escala y forma, y elementos de control de incidencia solar directa como parasoles, aleros, pantallas e incluso un patio que existe para traer luz rebotada.
El trabajo sobre estos sitios, sin preexistencias, o mejor dicho, que barren con ellas, para la aparición de cantidades de hábitats de forma instantánea, nos inquieta por su debilidad para la construcción del lugar. El lugar antropológico no puede ser una creación espontánea y superficial. Los lazos y herramientas disciplinares pueden estar al servicio de generar suficientes relaciones con el sitio para, desde allí, constituir un hábitat relacional, expuesto, abierto, con vectores de conexión cultural, visual, espacial, tecnológica y bioclimática. Con herramientas de arquitectura.
